Como su nombre lo dice La Serena era un ciudad apacible, hasta que en 2006 un debutante a escritor, quizás mayor para ser calificado de "emergente", apareciera con Las manos al fuego, novela que José Gai ambientó en su ciudad natal, la que llenó de intrigas y misterios. El libro ganó el Premio José Nuez Martín de la U. Católica a mejor novela editada ese año y de inmediato encumbró al entonces periodista en un escritor sobresaliente.
El escritor y también humorista gráfico falleció el 15 de junio de 2019 luego de años luchando contra un cáncer de médula.
Tras 20 años dedicado al periodismo, egresó de esa carrera en la U. de Chile en 1972, Gai se desempeñó también como humorista gráfico y durante una década publicó sus viñetas en el diario El Día de La Serena.
El hombre de manos entintadas por las letras y el arte, fácilmente reconocible por su manía de dibujar hasta en las servilletas y su estatura de 1,81 metros, tuvo entre sus obras más exitosas la novela gráfica “Capitán Garra”, con dos tomos; además es autor de “Los Lambton”, también premiada en 2010 por el Consejo Nacional del Libro; “El Caso P”; “El Veinte”; “Yo, Él”, todas obras publicadas bajo el sello de Tajamar Editores.
También editó libros de humor como "Sabor a gol" (1997), "Ojo en Tinta" (2012, Tajamar) y "Piñera, mucho, poquito,nada" (2011, Tajamar). De hecho, a pesar de la enfermedad que lo aquejaba se mantuvo activo y el año pasado publicó su última obra, una novela gráfica, con guión y dibujos propios, basado en la autobiografía de Alfredo Gómez Morel (1917-2014), titulada El Río.
La novela que lo hizo convertirse en escritor, era parte de una trilogía de la que Gai sólo alcanzó a publicar la segunda parte: Los Lambton(2009), que recibió el Premio del Consejo del Libro a mejor novela. Eso sí estuvo hasta último momento puliendo el manuscrito de la tercera parte: Cordobez esquina Presley, como también un libro de cuentos, titulado Sangre seca. Gai destacó por un estilo clásico, conciso, siempre privilegiando narrar una historia entretenida, usando gran cantidad de recursos expresivos.
José Gai también practicó la pintura, realizando varias exposiciones individuales.